Nunca ha habido un mejor momento para centrarse en los activos de reserva de valor.

Muchos *Boomers* y de la Generación X se refieren al estilo de inversión de los *Millennials* y la Generación Z como "Nihilismo Financiero", es decir, invertir en criptomonedas o empresas de boletos de lotería con extrañas anomalías en la estructura del mercado (bajo *float* de accionistas, alto interés en corto) como GameStop.

La desconexión para las generaciones mayores es que el Nihilismo Financiero es una respuesta completamente racional a una administración (Fed y Tesorería) que ha rescatado continuamente a los dueños de capital y a las generaciones mayores durante los últimos 17 años.

Bruce Springsteen escribió una vez:

"Bueno, conseguí un trabajo e intenté guardar mi dinero,
Pero tengo deudas que ningún hombre honesto puede pagar,
Así que saqué lo que tenía del Central Trust,
Y compré dos billetes en ese autobús de Coast City"

Esta es una historia tan antigua como el tiempo.

Cuando eres parte de la clase trabajadora y las deudas y la inflación siguen acumulándose, terminas saliendo de la curva de riesgo, es decir, solo hay ganadores y perdedores y no te dejes atrapar en el lado equivocado de esa línea...

Si se hubiera permitido que el ciclo natural de la deuda del libre mercado se desarrollara, el costo de vida sería mucho más bajo, la innovación de las empresas reales habría llegado más rápido.

En cambio, estamos atrapados en este extraño esquema Ponzi centralizado de intercambio de deuda por capital, esperando que la capacidad productiva de las fronteras libere suficiente crecimiento para la clase media.

Todo el mundo ha perdido la fe en nuestras instituciones y políticos. Estamos al final del ciclo de la banca central, las recesiones han sido prohibidas porque causarían una crisis monetaria, así que ahora estamos atrapados con un mundo financiero falso donde nada tendrá sentido en el papel para las valoraciones, pero sí lo tendrá cuando se piense en las valoraciones desde una perspectiva de estructura de mercado y flujo de capital.

Todo muere, nena, eso es un hecho,
Pero tal vez todo lo que muere algún día regresa...