La rivalidad más intensa en la historia de las apuestas de la NBA no fue en la cancha.
Jordan y Barkley apostaron millones y luego lo perdieron todo en la mesa.
Uno fue investigado. El otro enfrentó cargos.
Pero no fue el dinero lo que acabó con ellos.
Fue un comentario brutal.
Aquí está la historia completa.🧵 https://t.co/OXMtTSfTQz