Según las autoridades brasileñas e informes de los medios locales, unos hackers robaron hasta 148,0000 millones de dólares de las cuentas de reserva del banco central de al menos seis instituciones financieras brasileñas tras pagar a un trabajador informático solo 2.770,00 dólares en sobornos para obtener acceso al sistema.
El trabajador informático de 48 años, João Nazareno Roque, trabajaba para la empresa de software C&M, que fue contratada como intermediario bancario para gestionar la infraestructura de pagos entre las instituciones más pequeñas y el banco central. Roque declaró a la policía que un hombre que conocía su trabajo en C&M se le acercó fuera de un bar y que finalmente accedió a darle acceso a los sistemas internos de C&M por un total de 15.000,00 reales brasileños, o unos 2.770,00 dólares estadounidenses, según el sitio de medios locales g1 Globo.
Los hackers utilizaron entonces su acceso privilegiado para desviar alrededor de 800,00 millones de reales, o 147,70 millones de dólares, de las cuentas de las instituciones clientes en el banco central a cuentas controladas por los hackers, a primera hora de la mañana del 30 de junio. Las transferencias fraudulentas se detuvieron unas dos horas y media más tarde, cuando BMP, uno de los clientes de C&M, fue alertado de las transferencias sospechosas.
Los hackers han convertido alrededor de 30,00-40,00 millones de dólares en fondos robados en BTC, ETH y USDT utilizando exchanges *over-the-counter*, que a veces son utilizados por actores de amenazas para blanquear fondos ilícitos, según una estimación del detective de blockchain ZachXBT.
Un tribunal brasileño ha congelado algunas cuentas de destino supuestamente utilizadas por los atacantes, con alrededor de 50,00 millones de dólares en fondos robados. BMP, que sufrió una pérdida de alrededor de 73,80 millones de dólares, ha recuperado alrededor de 29,50 millones de dólares de los fondos, dijo el CEO de la firma, Carlos Benitez, a NeoFeed.
Roque fue arrestado el 3 de julio, unas 48 horas después del ataque, y actualmente se encuentra detenido a la espera de una mayor investigación. Una fuente dijo a Reuters que ningún cliente sufrió pérdidas como resultado del hack, porque las pérdidas se limitaron a los saldos de reserva de los bancos mantenidos en el banco central.