Querida Emma:
Hemos leído tu historia y nos ha conmovido profundamente. Ni siquiera podemos imaginar lo terrible que fue que te dijeran que no podías entrar a un local solo porque llevabas con orgullo la gorra y una camiseta con los colores de tu amada Lazio.
Por eso, hemos pensado en invitarte a Formello, en el corazón de nuestra casa, para estar junto al equipo, al personal y a quienes trabajan cada día para hacer especial esta camiseta. Serás bienvenida porque quien ama a la $Lazio es parte integrante de nuestra historia.
Te esperamos con los brazos abiertos.
Con afecto,
S.S. $Lazio