El número de direcciones de depósito de Bitcoin ($BTC) en los exchanges ha disminuido drásticamente. Este patrón apunta a una convicción a largo plazo cada vez mayor entre los inversores.
Los datos revelan un cambio drástico en el comportamiento que comenzó después del pico del ciclo de 2021. Entre 2015 y 2021, el número de direcciones únicas que depositaban $BTC en los exchanges aumentó de forma constante, con un promedio de 180.000 anuales. Sin embargo, desde 2022, esa tendencia no solo se ha estancado, sino que ha disminuido de forma constante.
Según el último análisis de CryptoQuant, el promedio de 10 años se sitúa ahora en aproximadamente 90.000, mientras que el promedio móvil actual de 30 días es de solo 48.000. Diariamente, el número de direcciones de depósito ha caído a alrededor de 37.000, registrando un mínimo de varios años. Los analistas dicen que esto indica una creciente preferencia por mantener Bitcoin en lugar de negociarlo.
El lanzamiento de los ETF de Bitcoin al contado ha desempeñado un papel clave, ya que ha dado a los inversores institucionales y minoristas acceso al rendimiento del precio de $BTC sin necesidad de mover o gestionar el activo directamente. Además, la menor actividad de negociación minorista en el ciclo actual ha reducido el comportamiento activo de depósito.
Al mismo tiempo, un número creciente de inversores, e incluso corporaciones, están adoptando un enfoque orientado al ahorro, tratando a Bitcoin como una reserva a largo plazo en lugar de un instrumento especulativo.
El informe decía:
“Estos cambios, que han surgido gradualmente con el tiempo, son precisamente los que impulsan la evolución de la identidad de Bitcoin en los mercados financieros. Bien podría ser esta transformación la que finalmente consolide el papel de $BTC como depósito de valor”.
Este sentimiento en el comportamiento de los inversores se repite a macro escala.
Bitcoin se considera cada vez más como un activo estratégico para las naciones que buscan fortalecer la resiliencia económica en el panorama mundial actual, según un informe reciente de CoinShares. El potencial de la cryptocurrency para cubrir la inflación, diversificar las carteras soberanas y ofrecer protección contra la inestabilidad geopolítica la posiciona como un complemento moderno del oro y las reservas de divisas.
Si bien la decisión de Estados Unidos en 2025 de agregar Bitcoin a sus reservas es un momento crucial, CoinShares señaló el escepticismo continuo entre los economistas que destacan su volatilidad y naturaleza especulativa.
A pesar de esto, con el aumento de la deuda global, la inflación y las crecientes tensiones geopolíticas, más gobiernos están explorando alternativas. La propuesta RESBit de Brasil y el supuesto interés de Rusia en las reservas de Bitcoin sugieren un impulso competitivo para asegurar una parte del suministro fijo del activo. Con una market cap de 2 billones de dólares y una creciente presencia institucional, Bitcoin se considera cada vez más como una opción de reserva creíble junto con las tenencias tradicionales.