Según CCTV News, la mañana del 1 de julio, hora local, el presidente de Estados Unidos, Trump, concedió dos entrevistas a los medios antes de partir hacia Florida para asistir a la inauguración del nuevo centro de detención para inmigrantes "Isla del Demonio Caimán", en las que habló de la "rivalidad" con el empresario estadounidense y exjefe de la Oficina de Eficiencia del Gobierno, Musk. En la Casa Blanca, al ser preguntado sobre si expulsaría a Musk, Trump respondió que "lo consideraría" y señaló que podría dejar que la "Oficina de Eficiencia del Gobierno", a la que llamó "una bestia que podría morder a su propio dueño", se encargara de Musk, y reiteró que Musk "ha recibido muchas subvenciones del gobierno". Antes de abordar el avión, en otra entrevista Trump afirmó que "la Oficina de Eficiencia del Gobierno estará vigilando a Musk, así ahorraremos mucho dinero" y añadió que Musk "no debería jugar este juego conmigo". [ChainCatcher]